Los humanos que beben sangre de vampiro adquieren automáticamente un punto de Potencia. Esto siempre me ha incomodado un poco.
Realmente me gusta la sensación de ser un superhombre que otorga al ghoul. Es de lo más esencial del preludio de los ghouls. También es un modo muy efectivo para colocar a los ghoul en un escalón superior de poder respecto a la Humanidad (así es como se sienten generalmente).
El problema que tengo es de homogeneidad. Un ghoul cuyo domitor sea Brujah puede aprender Celeridad y Presencia como disciplinas “de clan” (Potencia ya la tiene y no la puede subir generalmente), mientras que un Toreador puede aprender Auspex, Celeridad y Presencia (y tener el punto automático de Potencia). Esto crea cierto desequilibrio.
Además, este sistema plantea otros interrogantes que el Narrador debe resolver. Se supone que un ghoul abrazado conserva sus disciplinas, entonces, ¿todos los vampiros que han sido ghouls comienzan tienen un punto de Potencia? ¿Por qué entonces no convierten los sires a sus chiquillos en ghouls justo antes de la transformación? ¿Cómo es que los Assamitas, que pasan años como ghouls antes del abrazo, no tienen todos al menos un punto de Potencia?
Para solventar est problema es para lo que inventamos un sistema muy simple. Se trata de usar dos disciplinas separadas: Potencia y Potencia Ghoul. La vitae vampírica otorga una fuerza sobrenatural a los músculos del humano, lo cual se refleja otorgando un punto en Potencia Ghoul. La Potencia Ghoul funciona a todos los efectos como Potencia, pero se lleva la cuenta por separado. No se puede subir, aunque la sangre realmente poderosa podría otorgar más de un punto.
Aparte de la Potencia Ghoul, el ghoul puede aprender Potencia, si está entre las disciplinas de clan de su domitor. Siguiendo el ejemplo de antes, el ghoul Brujah podría subir en Potencia, con lo que ya no estaría desequilibrado con su contrapartida Toreador. La Potencia y la Potencia Ghoul simplemente se añaden cuando debe usarse, así que si el ghoul del Brujah tiene un punto de Potencia, sería equivalente a tener Potencia 2. De esta forma, los ghoules Brujah son tan peligrosos como les corresponde.
Cuando sucede el abrazo, se pierde la Potencia Ghoul (lo sentimos). La vitae vampírica ya no afecta de la misma forma a los músculos muertos. Las disciplinas que hubiera aprendido, incluida Potencia, se conservan, pero el personaje ya no tiene el empujón de los ghouls. Afortunadamente para él, pronto las ventajas (y desventajas) de la condición vampírica suplirán esta pérdida.